contexto, reconocer la idendad universitaria y hacerla propia en los estudiantes (2022,p.10).
Otros autores analizan la relación entre retención y parcipación de los estudiantes en la comunicación
de las instuciones universitarias en el escenario post pandemia en las la página InsideTrack y la herramienta U-
Planner:
Ante esta nueva realidad, las instuciones de educación superior enfrentan el reto de retener a su
estudiantado y, más aún, incrementar la matrícula. La página Web U-Planner recomienda que sean los propios
estudiantes los que expresen sus inquietudes a través de encuestas, que las instuciones provean formularios
donde estos puedan contactar al personal instucional para exteriorizar y sasfacer sus necesidades, darles
seguimiento y mantener comunicación con estos. Se destaca, además, la necesidad de resolver las brechas
existentes de estudiantes en riesgo y que estos sientan que son parte esencial de la comunidad universitaria.
(Rivera, Ocasio-Vega y López ,2022, p.3).
Permir que los estudiantes de primer semestre puedan expresar los temas que les causan dicultades
y proponer soluciones, ulizando los canales de comunicación organizacional, ayuda a que se sientan incluidos
en la toma de decisiones, al mismo empo que se alinea con los intereses de la universidad privada, logrando un
equilibrio que permita a ambas partes trabajar en el logro de sus expectavas. Desde la cultura organizacional
plantear una comunicación que sea inclusiva, parcipava y dialógica, incidirá favorablemente en los índices de
retención, especialmente en el primer semestre de las carreras.
León Rodríguez, en su tesis de Maestría, El sendo de pertenencia desde la cultura organizacional en las
instuciones de educación superior: Caso UDAL, expone que:
Es posible armar que gracias a la comunicación es que se hacen posible las relaciones entre personas,
quienes, en su acción e interacción, entretejen pautas que dan forma a los signicados atribuidos a
objetos y experiencias, creando la base para la cultura organizacional que, entre otras cosas, rige el
comportamiento y actud de los miembros de la organización, y cumple la función de implicación,
integración y cohesión de estos con la organización. (2016, p.64).
Después de referirse a la importancia del proceso de comunicación dentro de la cultura organizacional
de una instución, relaciona la cultura organizacional con la deserción escolar en los primeros semestres de las
carreras de la siguiente forma:
Si se toma en cuenta, que la mayoría de las deserciones de nivel superior son de carácter voluntario, es
importante enfazar que, en ciertos casos, lo que detona estas, son las experiencias personales, sociales
e intelectuales, que la cultura organizacional de sus instuciones les ofreció en los primeros semestres,
pues cuantas más integradoras son esas experiencias, más probabilidades ene el alumno de
permanecer en la instución. (2016, p. 65).
Donoso, y Arias plantean que:
La visualización de la retención como problema es una temáca en ciernes en nuestro medio, donde
aún no se comprende a cabalidad, su impacto social y económico, ni se enende en toda su magnitud
la red de implicancias que se derivan del fracaso en los estudios en la Educación Superior (2010, p.15).
La retención es un concepto intrínsecamente unido al de sasfacción estudianl. Surdez, Sandoval y
Lamoyi en su arculo Sasfacción estudianl en la valoración de la calidad educava, plantean: “La sasfacción
estudianl se puede conceptualizar como el bienestar que experimentan los alumnos por senr cubiertas sus
expectavas académicas como resultado de las acvidades que realiza la instución para atender sus
necesidades educavas” (2018, pp.9-26).